martes

Lavapiés.


Hay días en los que te reconcilias un poco con Lavapiés.
Ayer subía caminando por la calle que le da nombre y ví a unos policías cacheando a unos negros.

A pesar de ello, seguí caminando extrañamente feliz. Dos niños con pulmones como agujas se perseguían calle arriba. Un chico joven los arengaba. Éramos varios los que sonreíamos.

Llegué arriba aún extrañamente feliz.

Supongo que lo de la devolución de Hacienda habrá ayudado.

10 comentarios:

lobita dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
lobita dijo...

y la foto es preciosa.
Sobre lo de cachear a sospechosos de color, creo que Lavapies-no-pasa no se ha pronunciado todavia, hay debate sobre si apoyarlo o denunciarlo. Los sospechosos de blanco y negro están en vias de extinción, menos mal.

María Angélica dijo...

y menos mal que lo de los hombres "de color" sí que está en extinción. Supongo que los de Lavapiés no pasa, los llaman como tú; ¿estás pensando en hacerte del grupichupi?...yo podría estar en la cúpula, bien lo sabes...A mí ya no se me podría llamar blanca, pues ya estoy amarilleando, serán los años, -supongo-, que están oxidando mis enlaces, blanca paloma mujer.

lobita dijo...

cuando seas verde como yo, llámame "compañera" ...cruac cruac

Anónimo dijo...

a mi nunca me cachean porque se hacerme invisible

Dani dijo...

Yo salgo cacheado de casa. Si es que estos negros son más despistados...

¡he dicho negros!

Anónimo dijo...

?¿

Anónimo dijo...

?¿

Anónimo dijo...

y además racista

Dani dijo...

¿Racista yo?
Al menos firmo mis comentarios. Es una de esas cosas que sólo puedes hacer cuando estás dispuesto a mantenerlos delante de cualquiera. Incluso en persona.